miércoles, julio 29, 2015

Me niego... Me rehuso


 
Una vez, estando cursando una maestría recuerdo, como un compañero (de aquellos que actúan como los que lo tienen todo sin embargo son de los que no tienen nada) me comento que el solo tenia amig@$ que le aportaran (léase con dinero, carro, relaciones) y que como en este momento yo no le aportaba nada no estaba interesado en mi amistad.
Ese  episodio me provoco mucha tristeza, no por mi, sino por el.
Años mas tarde el karma se encargo de ponerlo en su sitio sin yo tener que hacer absolutamente nada.

Pero viendo y escuchando como estamos como sociedad ya el materialismo es desbordante en el dominicano, se ha convertido en la nueva doctrina caribeña

Y es que siempre me he negado, me he rehusado a ver el valor de las personas por su dinero, posesiones o estatus social.
He tenido la oportunidad de conocer e interactuar con mucha gente. Desde los encumbrados hasta los mas humildes y siempre he intentado hacer lo correcto.

Pero las reglas de la sociedad han cambiado, se admira mas las posesiones que la inteligencia. Mas la ropa que el corazón y mas el derroche que la humildad. Y eso me entristece profundamente por que para bien o para mal no fue lo que mis padres me enseñaron, no fue en lo que crecí creyendo.

Por eso, aunque vaya contra la corriente me rehúso  a ponerles el valor a las personas por lo que tienen. Me opongo que mi amor este en venta. No pienso utilizar o manipular a alguien para conseguir algún beneficio.

No voy a alabar o admirar a nadie por que tenga mucho dinero o sea hermos@.

Quiero ir mas allá, quiero ver lo que otros no ven, despojarles de su adornos y verlos denud@s (no físicamente obvio) sino ver quienes son en realidad.

Quererles y apreciarles por los que los hace únicos o únicas, por los que los hace humanos.

Quizás a los que piensan lo contrario les va mejor que a mi.

Eso es muy posible. Pero simplemente no puedo dejar de pensar que seguimos valorando más lo menos, a las cosas que a las personas.

Seguiré el camino menos transitado, por que a estas alturas se que lo verdaderamente valioso de la gente no se compra, ni se ve a simple vista.